Las regalo. Son preciosas. Recién nacidas. Su madre es enorme y me la regaló una mujer más grande aún. Nuestra Catherine Deneuve en el rincón. Me la trajo a casa un día, cuando era pequeña y no sabíamos muy bien que hacer con ella. La cuidamos, la mimamos, buscamos el mejor lugar. Y ahora, unos años después, es la mejor Aloe vera que hayamos podido imaginar. Es bonita, generosa, nos cuida las heridas cuando aparecen o cuando nos las hacemos, nos hidrata la piel en verano y además, para colmo de felicidad, nos ha regalado 7 crías alegres, bonitas también y verdes.
7 pequeñas macetas de plástico adornan la repisa de la ventana desde la que te escribo, al otro lado de los cristales. Y tal como esa rubia de ojos azules y risa sincera hizo, quiero hacer yo. Quiero regalarte una planta de Aloe Vera. Una pequeña criatura recién nacida.
¿La quieres? ¿Cuidarás de ella para que ella, luego, cuide de ti?
Un beso grande. mjo
Yo quiero una!!!
ResponderEliminarPor supuesto.
ResponderEliminarUna para tu nueva vida.
Ya verás que bonita.
un besote enorme. mjo
Yo quiero otra!!!!!
ResponderEliminar¡Qué bien!
ResponderEliminarVan a estar muy bien cuidadas.
Van a buenas casas.
(Y podré verlas creer.)
Un besote, cariño. mjo
Nota: ¿Enviamos una para Urretxu?
Preciosa,tengo que coger el tren de las 4 y algo,no me da tiempo a verte antes, besosss
ResponderEliminarMuchossssss
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