"Nunca fui una niña enfermiza, pero aquel invierno salía de una gripe para entrar en un resfriado. De tanto sonarme la nariz, la tenía en carne viva y se me formaban constantemente grietas y una capa de piel muerta bajo las fosas nasales. No íbamos al médico porque no podíamos permitírnoslo. Cuando la fiebre me hacía tiritar, me quedaba en la cama y no iba al colegio."
El silencio de las palabras. Jean Kwok
Yo sí era un poco enfermiza. Iba el médico y cuando la fiebre me hacía tiritar, me quedaba en la cama y no iba al colegio. Pasaba las horas leyendo.
Un beso de invierno. mjo
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