viernes, 21 de abril de 2017

Queso


Bonito, curioso, inesperado, ... ayer, un cliente agradecido, me regalo un buen queso, y no fue el queso en sí lo que me sorprendió, no, fue el agradecimiento. Alegó que me había implicado, que había trabajado para conseguir lo más adecuado, y que el resultado le parecía ...extraordinario. Y pensé: si no es por ti, es por mí. Si lo hago mal, no podré dormir, que me conozco. Y él se fue por su lado, prometiendo volver y yo me fui con su queso, ahora mi queso, tranquila y contenta, a dormir. 

No es sano ser muy exigente, pero tampoco lo es que las cosas que haces no te importen lo suficiente como para hacerlas lo mejor que puedas cada vez. 

Un beso con membrillo y nueces. mjo

Nota: No es la primera vez. En la lista: flores, mermeladas, caramelos, ...

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