jueves, 18 de junio de 2020

Duelo. Primera parte


Escribir para decir adiós. Para asumir la pérdida. Para concentrar el dolor. Para recordar a aquella persona que nunca más volverá. Escritoras y escritores han dejado excelentes obras relacionadas con el duelo, con un adiós real por la muerte de un ser amado.

Algunas joyas de la literatura, que en esta vida efímera ayudan a poner palabras a nuestros sentimientos: 

También esto pasará de Milena Busquets, sobre su madre muerta. Despedida que no cesa, de Wolfgang Hermann, sobre la muerte de su hijo adolescente. La novela de de Jorge Volpi,  Examen de mi padre, es un homenaje a su padre fallecido. Mortal y rosa, de Francisco Umbral. Duelo de Eduardo Halfon. Tiempo de vida, de Marcos Giralt Torrente. Di su nombre, de Francisco Goldman, escrito tras la muerte de su esposa amada.

Pero no se trata sólo de hablar del dolor al enfrentarse a la pérdida, sino de aprender de él, de compartir la experiencia para ayudar a otras personas ante la misma situación. Un tema triste pero necesario porque a veces toca mirar a la muerte a la cara.

Un beso de belleza en la tristeza. mjo

Nota: "Tras meses de deliberaciones, los sabios se presentaron ante el emperador con una propuesta: «También esto pasará.» Y la madre añadió: «El dolor y la pena pasarán, como pasan la euforia y la felicidad.»

No hay comentarios:

Publicar un comentario