"Inmune a la turbación, como a cualquier otra cosa que ella causara, en otro tiempo no habría advertido el desconcierto del joven. Pero al detectarlo ahora decidió que en el futuro no sería tan indiscriminada a la hora de expresar lo que pensaba, lo cual en cierto modo era una lástima, pues era lo que muchos de sus súbditos ansiaban. De terminó, en suma, reservar las confidencias para sus libretas, donde no hacían daño a nadie."
Un beso a las chicas de la libreta con flor. mjo
Nota: El libro, Una lectora nada común.
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