domingo, 13 de noviembre de 2011

Un funeral de laboratorio.


"Ayudar a la sociedad desde el más allá." (No os asustéis, no creo en los espíritus errantes. Sigo con el artículo ...)

"Donar un órgano salva una vida, dejar nuestro cuerpo a la ciencia salva muchas; ayuda a formar sanitarios, desarrollar nuevas técnicas quirúrgicas y hace avanzar la medicina."

Hace unos años estuve a punto de no contar más ovejitas por la noche para volverme a dormir. ¡Y no tenía hecha la tarjeta de donante! (¿se puede decir "donanta"?)

Ayer leía en un diario sobre los beneficios de la generosidad humana. Y leía también: "Aunque el nuestro es un país líder en donaciones de órganos, cotiza a la baja en las donaciones de cuerpos. "Es una cuestión cultural", "somos mediterráneos, y nuestra cultura siempre ha tenido un culto a la muerte muy especial. " Pues vaya. Igual va siendo hora de empezar a cambiar. Por cierto, es muy curioso, pero muchas y muchos adolescentes creen en la reencarnación. ¡Qué curioso!

Ahí queda eso. Un besote. mjo

Nota: "Lo que no se van a comer los gusanos, que lo disfruten los humanos". Conmigo, los gusanos, iban a comer bien poco. Mejor donación que criogenización.


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