No me lo puedo callar. Sé que no debería decir nada. Sé que muchas personas pensarán que soy una loca irreverente. Incluso alguna amiga (sí, C, me refiero a ti) me daría un codazo bien dado si pudiera para evitar el desastre que pueden causar mis palabras. Pero es que algunas cosas no me gustan. Y cuando no me gustan ... lo tengo que decir. No creas que no le he dado vueltas. Muchas. Pero es inevitable, tarde o temprano iba a ocurrir lo que está a punto de ocurrir. Lo voy a decir. Y que pase lo que tenga que pasar. Si alguien se enfada conmigo, tendré que aceptarlo. No hay más. Me siento en la necesidad de desahogarme, de exponer mi postura aún sabiendo que soy yo la que siempre manifiesto que si no tienes algo bueno que decir de algo, mejor es callar. Pero ... esta vez me salto mi norma. Yes, I will do it.
Ni lo entiendo, ni me lo creo, ni me gusta, ni me emociona. Esto es, ni más ni menos, lo que me ocurre. El anuncio de la lotería de Navidad de este año me parece un total desacierto.
Ya está. Lo dije.
Un beso de el jueves le dedicamos un momentito. mjo
Nota: Yo que lloro cada año con la ristra de anuncios navideños ... empezamos bien. No sé a dónde vamos a ir a parar.
Otra nota: Acabo de ver el de Suchard. Igual no está todo perdido. Aún es pronto.