viernes, 27 de mayo de 2022

Si miras bien

 

Dice Arsuaga que no podemos controlar nuestro lenguaje corporal. Y tiene razón. Siempre se nos escapa una sonrisa torcida, un guiño, un suspiro, un fruncir de cejas, un apretar los labios. Tal vez sea un levantar la cabeza, o bajarla, o llevarnos la mano al pecho. Muchos gestos nos delatan ante lo que nos gusta o nos digusta. No siempre son observados o tenidos en cuenta por las personas que nos rodean. No por todas, al menos. Pero algunas, las que nos conocen algo más, esas nos pillan a la primera, y normalmente responden a nuestro gesto con uno de complicidad.

A veces pienso, ¿no consistirá en esto la vida de la relaciones sociales? ¿en encontrar personas que reaccionan como lo hacemos nosotras ante una noticia, un comentario, o un comportamiento? ¿nos unirán las mismas consideraciones sobre la realidad que nos rodea? Yo creo que sí. Si algo me parece absurdo y junto a mí, alguien reacciona demostrando que ese hecho le parece absurdo ... chin chin. Ahí tienes un alma gemela. Eso puede ser el principio de una buena amistad.

Este paleóntologo que discute con el escritor me parece muy interesante. Si a ti también te lo parece, mueve una oreja sin control. 

Un beso celta. mjo

jueves, 26 de mayo de 2022

Hoy

 

Hoy termina el rincón hasta octubre. Junio, julio, agosto, septiembre ... y después, volvemos. La biblioteca recupera, los jueves por la tarde, su calma habitual. Nos van a echar de menos. Estoy segura. Hay personas que se acercan y afinan el oído para escuchar algún fragmento, alguna broma, ... 

Pero que no haya encuentros en nuestro rincón no significa que no nos veamos, leamos, contemos, cambiemos, ... libros y demás cosas que no son libros. 

Espero veros hoy y espero seguir con vosotras este verano. Yo esta tarde llevo la agenda y ponemos fechas. 

Un beso de hoy no debería llover, pero llueve. mjo

miércoles, 25 de mayo de 2022

Síndrome de Capgras

 

"El que abandonó la cama a las seis de la mañana de aquel día era un tipo idéntico a mí, pero no era yo. Acudí al cuerto de baño y me aseé un poco en la convicción de que se aseaba otro que me había suplantado durante la noche. Ese otro tenía una conciencia excesiva de su cuerpo. Era consciente de la cantidad de recursos biológicos y mecánicos que se ponían en marcha cada vez que daba un paso hacia una u otra zona de la vivienda. Ese otro se percibía como una máquina, como un robot de una perfección insólita de no ser por los mensajes de aflicción que sus articulaciones enviaban al cerebro.

No tardé mucho en averiguar lo que ocurría: tenía fiebre."

Sigo con La vida contada por un sapiens ...

Una amiga ha tenido fiebre hace unos días. A ella le gusta leer. Pero no le gusta Millás. Qué pequeño es el mundo, dirás. Surrealismo local.

Un beso de cormorán, que no de pato. mjo

martes, 24 de mayo de 2022

El tostador del pan

 

Me lo regalaron mis amigas de la infancia en mi 35 cumpleaños. Estaba embarazada. Me lo dieron en la cafetería Politena. (¿Te acuerdas de ese lugar, con sus barandillas de madera y sus paredes forradas?) Me encantó. Fue un amor a primera vista. Un tostador hermoso, cromado inoxidable, de una ranura, con termostato electrónico de 9 posiciones, botón de stop, pulsador de marcha, bandeja recogemigas, 900 w. ... Me hizo mucha ilusión. Me gustó mucho mi regalo. 

Hoy, me han dicho mis chicos que el pulsador de marcha no se queda, que no se engancha. Si quieres tostar el pan, te tienes que quedar ahí, con el dedo puesto. Sí, creo que esto es el principio de un triste adiós. Adoro mi fiel tostador, 17 años cumpliendo con nuestras exxigencias y nuestras manías: yo muy tostado, yo menos, ... Bueno, todo tiene un final, o dedo, o compramos otro (aunque igual ya no quedan). Lo someteremos a votación.

Un beso de solo ventas en la península. mjo
 

domingo, 22 de mayo de 2022

Millás y Arsuaga

 

"Al llegar el verano, el paleontólogo se fue a sus excavaciones y yo me retiré a mis escrituras temiendo, claro, que la separación, tan larga, deviniera definitiva. Arsuaga no es hombre de muchos correos electrónico, ni de mucho contacto telefónico, ni por supuesto de wasap. Arsuaga es distante, de manera que quizá el verano constituyera una ruptura difícil de reparar en el otoño. Sorpresivamente, el 1 de agosto recibí un correo en el que me ponía deberes: debía observar las huellas que dejaban en la playa los niños de tres o cuatro años."

¿Has adivinado ya el libro? ¿Sabes el o los autores?

La vida contada por un sapien a un neandertal. de Juan José Millás y Juan Luis Arsuaga

Llevaba tiempo esperándote. Ya estás conmigo y no pienso soltarte. Lectura de media tarde.

Un beso de ¿por qué me gustará tanto Millás? mjo

viernes, 20 de mayo de 2022

Karmele Jaio

 

"Sin quitarme los auriculares, le miro de reojo, compruebo que está en las últimas dos páginas de la novela y entonces percibo un brillo especial en sus ojos. Aspira fuerte el aire, lo contiene dentro unos segundos y lo expulsa en un suspiro. No puede ser. Mi marido está a punto de llorar con mi novela."

No soy yo. Un libro de relatos de Karmele Jaio

Un beso a los hombres que leen. mjo

viernes, 13 de mayo de 2022

Tirupati, Andhra Pradesh, India

 

Cada mañana, 400 barberos se ponen manos a la obra con sus tijeras y máquinas de rapar. Lo hacen simultáneamente y, de media, pelarán 25 cabezas cada uno. En el templo indio de Tirumala (en las afueras de Tirupati, Andhra Pradesh) es una costumbre que los peregrinos entreguen su pelo como ofrenda al dios Venkateswara, una de las encarnaciones de Vishnú. Es un sacrificio ‘estético’ pero temporal, pues el pelo volverá a crecer. Sin embargo, el orante le demuestra así a la deidad que está dispuesto a despojarse de algo que es valioso para él.

Tirumala tiene el clásico aspecto de los templos del sur de la India. Las torres gopuram presiden el complejo. En este, una blanca como un merengue piramidal y, enfrente, otra de corte más clásico bañada en chapa de oro. Es uno de los centros de peregrinación más frecuentados del mundo, con más de 60.000 visitas diarias, que durante los festivales importantes se multiplican por cuatro. En total, cada año desfilan por los patios y los santuarios unos 25 millones de personas.

Gracias a mi amiga A., por regalarme un libro que me lleva a mundos que no conozco. 

Un beso de trenza. mjo

jueves, 12 de mayo de 2022

Cambio, cambio

 

Hoy cambio libro por libro, o libro por beso, o por abrazo. También puedo cambiar libro por planta. O planta por libro. O por mandarinas. 

Hoy toca rincón. Pocos quedan. Este, otro con comida previa y otro último y final. No te los pierdas, que luego los vas a echar de menos. Ya verás. 

Solo quedan unas horas y nos vemos de nuevo.

Un beso impaciente. mjo

lunes, 9 de mayo de 2022

Las de la mesa redonda

 

Maravillosos esos días en los que empiezas tomándote un té a destiempo en Ledesma y acabas comiendo tortilla en el bar de tu pueblo. Y si además hace sol y buen tiempo, ni te cuento.

El sábado se alinearon los planetas para convertirse en un día de risas. Una con tacones, otra en zapatillas, blusas, vestidos, vaqueros, ... y no podían faltar las fotos. Montones de fotos. Sin ellas, se borran recuerdos.

Pasaron las horas poniéndonos al día. Todos los temas salieron. Fue divertida la cosa. ¡Cuánto tiempo! -pensaba yo. Cuánto tiempo.

Un beso del tamaño del balón de baloncesto. mjo

Nota: Sigo pensando que no parecemos tan mayores.

viernes, 6 de mayo de 2022

Hay alguien ahí

 

... que sabe si escribo, que sabe si leo, que sabe si voy o vengo. Que sabe que a veces estoy bien y a veces no tanto. Me mira y me sonríe. No necesita que le explique. Y yo sé que no necesito explicarle nada. Ella sabe. Y entiende. 

Anoche, después de nuestras confesiones a media luz, después de risas y cosas varias, alguien, sin querer, se llevó en su bolso mi móvil. Te lo perdiste. Ya te habíamos despedido en la esquina de siempre. Volvimos, nos líamos, ... ya te lo vamos el contar el jueves que viene, porque merece la pena. 

Un beso a la chica marinera con un corazón de lentejuelas. mjo

jueves, 5 de mayo de 2022

Un libro y un vestido color vino

 

"He crecido, pero sigo manteniendo una relación muy narcisista con los libros. Cuando un relato me invade, cuando su lluvia de palabras cala en mí, cuando comprendo de forma casi dolorosa lo que cuenta, cuando tengo la seguridad -íntima, solitaria- de que su autor ha cambiado mi vida, vuelvo a creer que yo, especialmente yo, soy la lectora a quien ese libro andaba buscando."

Irene Vallejo. El infinito en un junco. La invención de los libros en el mundo antiguo.

Un encuentro. Por fin. En él, redescubro tu pelo largo y tú mis gestos de amatxu. Pasa el tiempo, pero seguimos siendo las mismas. O no. No importa. No merece la pena pensar mucho en el pasado. Solo para recordar lo bueno. Y lo divertido. Volveremos a vernos pronto. Este sábado. 

Gracias por los libros. 

Un beso de palabras, brisa y tiempo. mjo

martes, 3 de mayo de 2022

Clases

 

En cada curso, en cada clase, descubro una joya. Suelo detectar pronto a las más trabajadoras, a las más obedientes, a las más creativas. Pero no es tan fácil encontrar ese diamante que se esconde tras una insegura consume papeles porque todo le sale mal. No me resisto, rescato los papeles y les doy una vuelta. Normalmente se sorprenden, y poco a poco ganan aplomo. Después, a disfrutarlo.

Hoy he visto esa mirada de yo no sabía que lo que hacía valía para algo que he visto años atras, en cada curso y en cada clase. Estos meses, con mascarilla, se me estaba escapando una personita delgada y nerviosa que quiere ser arquitecta y diseñadora de interiores. Ederto, le he dicho. (Ha nacido para ello.) Juntas hemos hecho flores mezclando ceras fluorescentes y lápices de colores.

Un beso para la niña del pelo largo. mjo

Nota: Ya estamos en mayo y eso se nota. Jaleo, jaleo.

lunes, 2 de mayo de 2022

Auschwitz

 

"Auschwitz, o Oswiecim, si uno quiere ser amable, es el lugar con más flores que he visto en mi vida. En toda mi vida. Todas las farolas que he visto están revestidas de una crinolina de flores, cada quince metros te encuentras corolas de varios colores que rebosan de las jardineras, unas estatuas florales en forma de esquimal se pavonean en las plazas, por no hablar de los miles de arbustos y macetas."

Tengo una amiga que quiere ir a Auschwitz. Desea ir con todas sus fuerzas. Me lo ha dicho un par de veces. Creo que busca un yo voy contigo. Pero no puedo. No podría pasearme por allí sin sufrir. Lo sé. No tengo dudas. Qué diferentes somos unas personas de otras -pienso. Ella quiere, y yo no puedo.

Es un fragmento de Serge, de Jasmina Reza.

Un beso a esa amiga que no lee este blog y no sabrá que he escrito esto. mjo