De vez en cuando...

"¿Cómo que no la conocía? La había visto por primera vez el 5 de septiembre, martes, a las doce y cuarto de la mañana. Estaba mirando las asignaturas del nuevo curso cuando una chica se puso junto a él y, con su bolígrafo de cuatro colores, empezó a tomar unas notas rápidas en una libreta de papel cuadriculado. (...) Miguel observó sin parpadear cómo se alejaba y fue justo en ese momento, a las doce y cuarto según el reloj de Secretaría, cuando se mareó y tuvo que sentarse intentando asumir lo que acababa de ocurrir. Sin mediar una sola palabra, esa chica había alterado todas las células de su cuerpo a lo tonto y a lo bestia."

Los días felices de Mara Torres

... algo ligero.

Un beso de vespa. mjo