Ya queda menos para todo. Para ver a la chicas del rincón, para el fin de semana, para que deje de llover, para celebrar el día de la madre, para subir a Gorbea, para la hora de la salida de la escuela. Cada minuto que pasa ... hace que ya quede menos. Para bien y para mal.
Me estoy tomando una limonada, (les quedaba poco tiempo a los limones para dejar de ser amarillos) y veo la lluvia por la ventana de la sala, que da a un balcón lleno de macetas y plantas verdes. Esto es el presente. El pasado cabe en una caja de cartón y el futuro pinta curioso. ¿Qué más se puede pedir? Verte, tal vez.
Un beso grande, estés donde estés, hagas lo que hagas y falte el tiempo que falte. mjo
No hay comentarios:
Publicar un comentario