jueves, 2 de febrero de 2023

Me he vuelto a enamorar

 

Ella se llama Martha Batalha, es brasileña y me ha robado el sueño, el hambre y las ganas de pasear. Yo ya solo quiero leer.

La vida invisible de Erídice Gusmao, se apareció ante mí, entre el resto de libros, como si me estuviera llamando. Tal vez me oyó aquel jueves, cuando dije en voz alta que andábamos un poco insatisfechas. No lo dije en serio. O igual sí. No lo sé. El caso es que ayer este libro, cuya portada tiene una mujer morena, que bebe de una taza coloreada, con los rulos puestos (como tantas veces he visto mi querida madre) mirándome de frente, este libro, que creo haber tenido antes entre mis manos ... se vino a casa.

"Zélia no se había convertido en un simulacro de ornitorrinco así de la noche a la mañana -esas cosas de la evolución llevan su tiempo-. La transformación empezó en la infancia, cuando lo que tocaba que fuera un don se convirtió en un pesar. De su padre había heredado el gusto por las noticias; de su madre, la vida circunscrita al hogar. Del mundo obtuvo disgustos; del destino, la falta de oportunidades. Así se formó la esencia de la chismosa." 

Un beso a las personas enamoradizas. mjo

Nota: Gusmao se escribe con eso que lleva la ñ, arriba sobre la a, pero no sé dónde se encuentra en mi teclado. Si me lo dices, lo corrijo.

No hay comentarios: