martes, 24 de noviembre de 2015

Julio


Largas horas diferentes.

"Si se está obligado a no moverse de la cama, una pieza de hospital se vuelve cabina estratosférica: todo en ella responde a un ritmo que poco tiene que ver con el ritmo cotidiano de la ciudad ahí afuera, ahí al lado. Se está en otro orden, se entra en otros ciclos, como una astronauta que sin embargo siguiera viendo los árboles más allá de la ventana, el paso de las nubes, la grúa anaranjada que va y viene transportando cemento y ladrillos.

El tiempo se contrae y se dilata aquí de una manera que nada tiene que ver con ese otro tiempo por el que oigo correr los autos en la calle del hospital. A la hora en que mis amigos duermen profundamente, la luz se enciende en mi pieza y la primera enfermera del día viene a tomarme el pulso y la temperatura. Jamás, del otro lado, tomé el desayuno tan temprano, ..."

Un beso a las personas que guardan cama en los hospitales. Especialmente a una que manda fotos sacando la lengua.

Nota: Por supuesto, Julio. Julio Cortázar. Papeles inesperados.

Podría escribir más, mucho más, pero mejor paro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No pares.
R.