martes, 3 de marzo de 2020

Preguntas arriesgadas


Esta mañana, cuando aún nadie de esta famila se había lavado aún la cara, no se le ocurre otra cosa que preguntarme, así, sin anuncio ni previo aviso: ¿qué quieres como regalo para tu cumpleaños? Se me cae el zumo, la tostada y me da la taquicardia. ¿Regalo? ¿Qué regalo? Socorro. Ni lo había pensado.

Sé que estarás pensando "Ya, seguro. No te lo crees ni tú, bonita." Gracias por lo de bonita, pero no. No lo había pensado. Lo juro. Bastante ocupada estaba yo pensado en cómo celebrarlo, como para pensar en un regalo. Y como tampoco había llegado a ninguna conclusión sobre la celebración. Pues eso. Socorro todo el rato.

Y de repente me ha entrado la misma sensación que tuve antes de jurar los votos. Miedo, sudor, insomnio, espasmos, .... y sobre todo, pánico escénico. Mucho pánico escénico. A punto estuve de suspenderlo todo. Esta vez no hay nada que suspender, porque no hay nada organizado. Nada de nada. Y siento la espada de Damocles sobre mi cabeza, oscilando, esperando una decisión que nunca acaba de llegar. ¿Y si no celebro? ¿Pasaría a los anales de la historia como la primera persona que no celebra su 50 cumpleaños? No, seguro que el mundo está lleno de indecisas como yo. 

Yo lo celebraría, es cierto. Pero no se me ocurre ningún plan que nos guste a todas. (Bueno, si fuera rica, os invitaría a algo gordo. A algo tipo Crucero por la Polinesia Francesa. Pero de rica tengo lo mismo que de operativa. Cero.) 

De momento, me he cortado el pelo. Hay que estar preparada por lo que pueda pasar según se acerca la fecha. Si tienes alguna idea sobre ambas cosas y quieres echarme un cable ... estoy abierta a sugerencias. Sé que ando tarde. Que esto lo tenía que haber decido hace ya algún tiempo. Pero ... soy un desastre. 

Un beso de futura cincuentona en plena crisis. mjo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Holaaaa, la primera no serías. Mi señor esposos no hizo nada de nada, y yo voy por el mismo camino.
Un abrazo
Fátima

marieta soul dijo...

¡¡¡¡Gracias!!!! Saberlo anima mucho.

Y más aún, saber que andas por ahí. ¡¡Te echaba de menos!!

Un besote. mjo