Una semana patas arriba

Menos mal que todas llevan un jueves incrustado en las costillas. Cada semana es un mundo. Y en ese mundo, locura. Nunca sabes lo que toca al día siguiente. Nunca intuyes lo que viene. Haz siempre lo que creas que tengas que hacer. Así no conocerás el arrepentimiento. Palabras de mi ateo favorito. Sabio. Muy sabio.

Gracias a que cada siete días hay un rincón... una semana patas arriba puede acabar siendo incluso divertida. 

Un beso a las chicas de la tortilla. mjo

Nota: Os aprecio mucho. No sé si se nota.