viernes, 31 de octubre de 2014

Jalogüin, Jalogüin.


Ahora que ya sé que estas notas que escribo en el blog no son más que tonterías (y no lo digo yo, que lo dice una querida amiga, con más canas que yo y que me riñe cuando leo porno)...(y lo sé, tiene toda la razón del mundo, pero qué le vamos a hacer, es cierto, a veces sólo escribo tonterías, pero es porque me divierto) ahora, digo, que ya sé que sólo son papanatadas, puedo contar sin rubor, que hoy es Jalogüin y que yo me quiero disfrazar. 

Se lo prometí a unos niños mientras nos dedicábamos al noble oficio del recogimiento de piedras en pleno fin de semana, juguetón y veraniego. Y lo que se promete en semejante situación no se puede olvidar y mucho menos incumplir. Allá cada uno o una con su conciencia, yo esta noche me pongo zombi total que sino mi palabra vale menos que la tinta con la que escribo. Y no escribo con tinta (se pilla, ¿no?) Que no se puede ilusionar al personal en un ataque de exaltación de la amistad para después decir donde dije digo ahora no digo nada. Trampa. 

Que viernes normales hay a patadas y viernes para hacer el bobo algunos menos. Aprovecha. Suéltate la cana, píntate la ojera y vamos a sorprender a nuestros hijos que ellos nos sorprenden cada día. 

Un beso de proyecto de zombi que da miedo, mucho miedo. mjo

Nota: De todas formas, si no os disfrazáis, no pasa nada. Os quiero igual. 

No hay comentarios: