martes, 24 de mayo de 2011

De tiendas.

No ha sido un efecto óptico, no me he vuelto compradora compulsiva y no tengo necesidad de renovar mi fondo de armario. (Que dicho sea de paso, tiene muy poco fondo.)

Quienes estos días me habéis visto (vuelta y vuelta) con un montón de bolsas (de papel, muy importante, el plástico "no, gracias") de diferentes establecimientos de alta, media y baja costura, cual Julia Roberts en "Pretty Woman", no sufráis de envidia, nada es para mí. ¡Qué mas quisiera! Todo es para la compañía. Sí, he estado comprando cositas para Markeliñe, que pronto estrenan.

Trajes, vestidos, tacones, de todo un poco. También tirantes, zapatos de baile, pistoleras, ...
Cada trabajo es diferente. Cada personaje necesita una personalidad. O varias.
Imaginar, elegir, comprar, ... me encanta. No ha sido el primero y espero que no sea el último. Ya os hablaré más de él.

De momento sólo pienso que tengo un montón de complementos para devolver, un montón de cosas para coser y mi mesa está llena de facturas. (Ésta es la parte menos divertida.)

Bueno. Lo dicho. Si me ves por la calle como una ricachona que no tiene otra cosa que hacer que irse de tiendas a pulir la visa ... recuerda ... a veces, nada es lo que parece.

Un beso grande ... y gracias a las dependientas y los dependientos por su paciencia. marijo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Los y las dependientes estaran deseando atenderte para hacer caja, algunos molestamos para irnos sin pillar nada. Sobretodo en estas epocas de crisis que nos obliga a mirar los precios con lupa... esperando, que con un poco de suete, se les caiga algun numero de la etiqueta al suelo.
Un beso y buenas compras.

marieta soul dijo...

Qué bonito eso de que "se les caiga algún número de la etiqueta al suelo". Y gracias por desearme unas buenas compras.
No sé quién eres, pero espero que vengas a verlas puestas en las actrices y en los actores.
Un beso.