Todas las chicas besan con los ojos cerrados. Lo ha escrito un tal Enric Pardo y está en la estantería de novedades de la biblioteca. Justo al lado de una novela de ciencia ficción. No puedo copiar aquí un fragmento porque no lo he pedido prestado. Lo he dejado para otro día. Y si otro día no está, será que no tocaba ese libro. El tema es que el título llamó mi atención. Y se formaron unas cuantas preguntas en mi cabeza ... ¿Quedarán títulos sin publicar, después de tanto tiempo? ¿Cómo hacen para ponerle nombre a un cuento? ¿Quienes son más originales, ellos o ellas? ¿Puede un libro no tener título? No, eso creo que no. ¿Cuál es el libro con el título más raro que has leído? Y no me digas que es La insoportable levedad del ser, que tan raro no es. ¿Se llevan los títulos largos para esta primavera-verano o mejor los cortos? Y las dedicatorias ... eso sí que es para pensárselo bien. Porque imagina, si vas a escribir muchos libros en tu vida puedes tomártelo con calma, pero si vas a escribir uno o dos (como mucho) aprovecha bien la ocasión que luego no hay vuelta.
El caso es que hace tiempo S. me insistía en la idea de hacer un taller de escritura en el rincón, ¿empezamos por el título o eso lo dejamos para el final? ¿pensamos ya en la dedicatoria? ... a la vida ... que me ha dado tanto ...
Es broma. Un beso. Hasta pronto. mjo
3 comentarios:
¡Qué bien escribes! Interesante reflexión, revisaré mi balda de libros y te haré un informe prelimiar sobre títulos, jaja.
Besos
Preliminar, quería decir
Xibela, Xibela, no me digas esas cosas que me da mucha verguenza.
Un besote. mjo
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