Un micro mundo de luces y colores.
Yayoi Kusama (Matsumoto, Nagano, 1929). Sala de espejos del infinito – Deseo de felicidad para los seres humanos desde más allá del universo (2020) Museo Guggenheim Bilbao.
La artista comenzó a trabajar los motivos que caracterizan su producción a una edad temprana, como consecuencia de las alucinaciones que sufría.
La Sala de espejos del infinito – Deseo de felicidad para los seres humanos desde más allá del universo, es una de las últimas obras realizada por la artista nonagenaria. Este espacio proyecta las alucinaciones de Kusama, nos hace partícipes de su universo obsesivo y nos transmite la necesidad de la “auto-obliteración”, invitándonos a desaparecer en el vibrante y único juego de las luces de colores, que se multiplican sin límites en las paredes especulares de esta habitación infinita.
Un beso de ojalá el mundo fuera tan bonito. mjo
No hay comentarios:
Publicar un comentario