Dice una amiga que percibe cierta flojera en las fuerzas. No. No. Y no. No hay que desfallecer. Cada día que pasa ... nos deja un día menos que pasar. Pronto, todo esto será un recuerdo.
Aprendemos de todo lo que ocurre en nuestras vidas (o eso debemos). Y esto no es diferente al resto. Cuántas veces me habré peleado con la persona que me dió la vida y ahora, todo lo que dice me suena a gloria bendita. Valoramos mucho a las personas que amamos, pero más aún si existe algún riesgo cercano.
Hoy, como todos los días, haré unas llamadas, escribiré a algunas personas, porque creo que debemos estar en contacto. Es importante. Hacerlo, genera resistencia. ¿No te has dado cuenta de que cada día el aplauso de tu calle es más largo? Aplaudimos al personal sanitario y a todas las personas que trabajan para hacer más llevadero nuestro aislamiento. ¿No te preguntas nunca quién hace posible que tengamos todo lo que tenemos? Y nos aplaudimos a nosotras mismas, por resistir, y vivir cada día con la mejor de las voluntades posibles. Por aguantar la situación con una sonrisa para la vecina cuando sale a dar palmas al balcón o a la ventana.
No te rindas. Hay días mejores y días menos mejores. Podemos con todos.
Un beso de si necesitas algo, avisa. mjo
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